«¡¡¡Un paloooooooo!!!». ¿Sabéis de qué anuncio estamos hablando? Aquel de Limon&Nada, del grupo Coca-Cola, en que un niño se ponía eufórico al ver que le habían regalado un simple palo. Sí, un palo que no hacía nada. Sin botones, sin pilas… Nada. Un palo normal y corriente.

Ese humor simpático gustó a mucha gente y el vídeo se hizo viral. Pero, ¿cuál era la campaña de Limon&Nada? Anunciaban que su bebida es algo sencillo, normal. Sin más. El eslogan de la campaña era «La vuelta a lo sencillo». Y el anuncio fue muy gráfico. ¿Qué hay más sencillo que jugar con un palo, una piedra o una caja?

La marca regalaba esos juguetes tan sencillos si entrabas y te registrabas en la página web jugueteslimonynada.com. Ahora, si entráis, os redirige a la web de Coca-Cola, por si creéis que todavía podéis conseguir uno de los juguetes.

Que te dieran uno de los tres juguetes suponía registrarse en la web. ¡Hasta medio millón de personas lo hicieron! Esto significa que Coca-Cola, gracias a esa campaña, tiene los datos de 500.000 personas a las que enviar promociones, publicidad, etc. por mail. A parte de la viralidad del anuncio, lo que te da presencia de marca, en el registro de tantos usuarios está parte del éxito que tuvo la campaña para Limon&Nada.

Sobre la viralidad del anuncio, mirad si gustó que en YouTube podemos encontrar un vídeo del spot en bucle durante una hora. Y es que frikis los hay en todos lados… Si queréis, os podéis echar algunas risas con los comentarios del vídeo.

Un anuncio sencillo, fácil de producir y muy efectivo. La viralidad, como hemos comentado en anteriores ocasiones, no tiene precio. Es algo que te llega con algo de suerte, pero que tienes que buscarla. Ángel Torres y Lucas Paulino, los publicistas «culpables» del fenómeno del palo, se toparon con la viralidad, pero tras mucho trabajo. Como dicen: «lo que hacemos parecen tonterías, pero tonterías muy bien pensadas». Mejor definido, imposible.